Por Eduardo Magoo Nico
Une femme est une femme
Hoy la sirenita
Amor de la ballena por los náufragos
Animal de piel fría, y sangre caliente
Sobre una roca en la rompiente
Repasa su pasión terrestre…
Hay una infamia en lo que ella trae
Parte y enluta
Una blancura excesiva y transparente
Ofelia de cuya mano se abrió el ramo
En el agua lenta del estanque
Queriendo decir sólo lo propio
Perdimos la palabra en esa tierra de ninguno
(El lugar de nuestro encuentro)
Leves los toques que sentimos en la espalda
(Casi imperceptibles empujones)
Yo que ya no sé
Cómo el cuerpo de una mujer
Podría ser acariciado
De sus tetas blandas me prendí
Como un parásito insaciable
Ahora vuelven a mí las palabras
Que en vos hubiese aborrecido
Foca parlante…
Viscosidades, equívocos, espasmos
Seda, anemia, corales
Pulpos, ansiedad, sonambulismo
Orcas, biso
Hipocampo, erizo…
Loloch loloch (amorcito)
Lola pirà, piramboiita, cururù…
¡Siestas de sol!
¡Sì! ¡Siestita!
Y ese tu: «huele a sobaco de lobo«
Dicho con un mohín tramposo
Uno viene como dormido
Cuando vuelve al tranco, del desierto
Basta el declinar de un parpadeo
Para que unos hilos invisibles me envuelvan
En la dulce cautividad
De quien por bien poco se rinde…
Dos pálidas camelias o un rubicundo eucalipto
Son suficientes
Para verme lanzado, nuevamente
Sobre el delirio del mar
Toda juventud que ríe…
La Lepido-Sirena-Paradoxa
(En mi pesadilla)
Me comía lentamente por el culo
¿Su audacia?
Introducir todo el rimero en la ranura
Fina/Rosada
¿Estrecha?
Toda la remembranza
Todo el imaginario de uno
En el fruncir del otro
(La cabeza como una antorcha en llamas)
Y junto a la aborrecible enfermedad del abrazo
(Encendido)
La arcada
Como una flecha lanzada contra Bora y Marea
Los hombres y mujeres de mi generación
Que habiéndose ya batido
Aún están dispuestos
En este virtual «último asalto»
A talar de un tajo el arto necrosado
A poner el cuerpo vivo
En el adorno
Y con las banderas de Alceo
Bagual/Calelián/Catriel/Calfucurá
Calfiao/Pincén
Molfinqueupú
Nauculeo/Namuncurà
Epumer y Baigorrita…
En en el frenesí del trazo
Cortar la tarde
Armar la bronca
Morir-matando
Hay una crispación de nervios
Que anticipa todo tiempo venturoso
Veo la luz de tu voz
Tensa como la cuerda de un arco
«Ebria de ausencia, la vida es vasta…
Agua que parpadea»
Su tensar se acentúa
Con el temblor de los cobardes…
(De la «ira de los elementos»
Tal vez debería hablarte)
Pero debo aún arrastrar el cadáver
De quien me ha venido arrastrando
Hasta el borde mismo de este embudo
Que no se abisma
(Del agujero en ciernes)
De esta preciosa Mira
Que no quiere, todavía, abrir sus ojos…
¿Un animal forzado a seguir amando?
¿A vivir para la muerte?
Contento de verme envejecido
Envejecer este poco más aún…
Hasta casi no poder arrastrarlo
(La Lepido Sirena sigue haciendo lentamente su trabajo)
Saturado de alabanzas y podrido en formas
Me maravillo:
Sea ya por su naturaleza / Haya sido por el huerto
(Por el orto, por el muerto)
¡Toda juventud que ríe es invencible!
Eduardo Alberto Nico nació un 22 de marzo de 1956 en Lomas de Zamora, Provincia de Buenos Aires, Argentina, en la casa que era de su madre (antes del remate). Vive y trabaja en Trieste (Italia) en el ámbito de la psiquiatria democrática “de escuela basagliana” (Franco Basaglia realiza y promueve desde Trieste una profunda reforma del sistema de salud mental italiano, logrando a través de la ley 180, la abolición del manicomio y la restitución de los derechos civiles a los “locos”). Los años juveniles, pasados en Argentina, lo ven formarse en el compromiso político contra la dictadura militar y en la actividad cinematográfica. Sucesivamente, pasa a la expresión poética y a la fotografía.
Publicó en Argentina un libro de poemas, “La Polaca” (edic. Cronopio Azul, 1995), y el relato “Resurrecciòn”, en el diario Perfil, de Buenos Aires (6/1/2008), el libro de poemas “Puros por Cruza” (Editorial El fin de la noche) en 2011, y se encuentra en proceso de ediciòn en Italia “Servidumbres” su tercer libro de poesía. Ha realizado lecturas con buen suceso de público en Buenos Aires junto al grupo “Verbonautas”. Edita desde el 2005 su propio blog literario en la Web, “Se escribe: Magoo” (http://magoolefou.blogspot.com/).
En Italia ha publicado la fotonovela “Escuela de Sirenas” en el suplemento semanal de el diario “Il Manifesto” (Alias-9.02.2002).