Por José Luis Domínguez
La ventana.
afuera
en ese viejo anonimato de la noche
una luna posa su lengua de luz sobre las hojas de eucalipto
la raíz de un cedro que se negó a la sombra a la humedad
fragmentando la acera
el vaho de mi boca en el cristal
obceca la visión de estos dos mudos centinelas de mi calle
dentro
la mesa el corredor la chimenea el reclamo antiquísimo del fuego.
En otra habitación
a esta misma hora
una mujer hilvana lentejuelas de color verde esmeralda.
La noche nos va uniendo
nos va uniendo el impotente grito que encierran en el mármol las paredes
el mosaico triste que cuenta nuestros pasos
la incisión del tiempo en el reloj de arena en nuestros cuerpos.
El porvenir no es solamente un niño despojado de sus ropas,
es también
el porvenir
un niño huérfano.
DOS
Frente a un espejo,
frente a un rostro que se mira a ratos,
frente a unos ojos que leen entre líneas la tristeza del azogue,
y sobre una página que está encima de la mesa –tabla de náufrago– dibujan esas manos, el lengüetazo impune, bífido, lacerante, del recuerdo.
Huérfano,
árbol partido a la mitad por la centella del olvido,
nunca te quiso,
pobre hemisferio de dolor.
El cuerpo pesa como un fardo ineludible.
Estas palabras no serán nunca la reconciliación del hombre con la piedra
sino
la sorda,
lenta,
lentísima,
reconciliación del hombre con el hombre.
LA LLUVIA
La lluvia
que no el amor
es el tema central de este poema.
La lluvia
que no la sangre
continúa mojando el cuerpo de las cosas.
La lluvia
se siente en nuestras venas
la interminable pulsación del mar.
Pienso en ese gato pardo que va saltando uno a uno los tejados
en toda su habilidad extraordinaria de ver
a través del velo denso que es la noche
envuelto siempre en el absurdo de ignorar cómo se forma un arcoiris.
Mañana
cuando salga el sol
una casa de adobe habrá de abrirse
como unos ojos ciegos a su primer milagro.
José Luis Domínguez. Escritor polígrafo nacido en Cd. Cuauhtémoc, Chihuahua, 1963. Es promotor cultural desde 1992, cuando funda el primer Taller literario en su comunidad. Coordinó el grupo filosófico de los Neoexistencialistas y el taller literario “Scripta manent”, hoy llamado “Octavio Paz”. Ha coordinado los talleres literarios en las ciudades chihuahenses de Jiménez, Delicias, Guerrero. Ha fundado, coordinado y sido colaborador de varias revistas literarias del norte de México.
Libros: «Jonás», 1996; «Quinteto para un pretérito», 2000; «El jardín del colibrí», ensayo literario, 2002; el poemario «Los dedos en la llama”; crónica y memorias «El Barrio Viejo de mis recuerdos», 2006. El libro “Diez leyendas de Cuauhtémoc”, 2007. En 2008, la editorial canadiense Lettres des forges le publica “El amor es un tibio, tierno cuerpo de mujer” en francés y español. También aparece el libro “El amor destruye lo que inventa” en el sello de la editorial de la Universidad Autónoma del Estado de México. Sus textos poéticos también han sido traducidos al inglés y al griego. En el 2009, la editorial veracruzana de Orizaba, Letras de Pasto Verde, le publica el cuadernillo de poemas titulado “Homenajes”. En el 2012, la editorial de la Benemérita Universidad de Puebla le publica el poemario “Palimpsesto”. En el 2013 publica el libro 12 Leyendas de Cuauhtémoc”. En el 2014 publica su poesía reunida “Los dedos en la llama”. En 2016 publica los libros “La otra historia de los menonitas”, “Manual de Poética para Universitarios” y “Dèja Vu y otros cuentos”. Desde hace ya varios años ha trabajado fomentando los cineclubs en varios cafés y restaurantes de su comunidad, además de ser el editor de los trabajos literarios de los alumnos del taller que coordina en su comunidad.