Tres sorbos de café: Para leer en voz alta
… desde niño, siempre, he tenido fiebre... no mucha; dos o tres décimas sobre la norma, pero bastaba para que cada semana me llevaran al doctor... me buscaron de todo... virus, bacterias, hongos, alergias, alienígenas y jamás encontraron nada que fuera causa de mi fiebre… sólo mi intrínseco y precoz deseo de molestar... al final la receta fue: — señora, deje de tomarle la temperatura —... fin de la fiebre... de entonces para acá mi relación con los doctores ha sido múltiple y variada... tuve un cardiólogo cuya asistente era igualita a Natalie Portman y hacía que todos los electrocardiogramas salieran alterados...